Parménides: El Poema de la diosa
Werner Jaeger en: "La teología de los primeros filósofos" (pág. 99-110) dice:
"Nadie que estudie esta sobrenatural obertura podría nunca suponer que el prpósito del filósofo en este pasaje sea montar un escenario impresionante. La misteriosa visión del reino de la luz que alcanza al poeta es una auténtica experiencia religiosa: cuando la flaca vista humana se vuelve hacia la verdad oculta, la vida misma resulta transfigurada. Se trata de un género de experiencia que no tiene lugar en los cultos oficiales, más bien propio de las prácticas piadosas de los misterios y ceremonias de iniciación y, como estos florecían en el sur de Italia, es posible que Parménides haya tenido conocimiento de ellos allí. En esta descripción de Parménides nos encontramos con una íntima experiencia sumamente individual de lo Divino combinada con el fervor de un hombre piadoso...
A lo largo de la historia del pensamiento griego advertiremos una y otra vez cómo el espíritu filosófico construye su propio kosmos con conceptos tomados de la vida religiosa y política y refundidos hasta que se han vuelto de un carácter autéticamente filosófico. Lo que hizo Parménides fue tomar la forma religiosa de expresión y trasponerla a la esfera de la filosofía de tal manera que dio forma a un nuevo mundo racional y profundidad al pensamiento.
Parménides anuncia en su propio nombre una singular revelación como Hesíodo... No se vanagloria de este acontecimiento, sino que se siente como un simple instrumento de ese poder. Ese camino "no frecuentado por los hombres" es el de los ritos de iniciación. Como Píndaro hala de un "camino de Zeus" por el que tiene que viajar el alma tras la muerte. Hesíodo habla del "estrecho sendero" de la virtud (areté) y el ancho camino de la miseria.
Un teólogo deploraría la ausencia de un Dios en este misterio, pero ha de verse el pensamiento de Parménides como un auténtico misterio y revelación y conmueve profundamente ver cuánto significó para Parménides la experiencia de la naturaleza del Ser. Para decirlo de otra manera, el elemento religioso está más en la forma que en el tema de objeto de su indagación como algo divino."